Que aprovechen la sangre y el agua que brotaron para ellos
- Categoría: Es la hora de la Divina Misericordia
"Oh, qué enorme caudal de gracias derramaré sobre las almas que recen esta coronilla: las entrañas de mi misericordia se enternecen por aquellos que rezan la coronilla. Anota estas palabras, hija mía, habla al mundo de mi misericordia. Que toda la humanidad conozca mi insondable misericordia. Es la señal de los últimos tiempos; después de ella vendrá el día de la justicia. Mientras todavía queda tiempo, que acudan al manantial de mi misericordia; que aprovechen la sangre y el agua que brotaron para ellos" (Diario de Santa Faustina, nº 848).