Nuestra sociedad sufre, día a día, el drama del aborto. Son miles las mujeres que deciden abortar porque piensan que es la mejor decisión. El genocidio silenciado que sufren estas vidas humanas está siendo acallado por los gobernantes y por los que intentan manejar el mundo.

Señor, Tú siempre eres nuevo. Ayúdame a no tener una mirada envejecida sobre ti.

«Les aseguro que en un abrir y cerrar de ojos les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará fe sobre la tierra?».

Daniel Ávalos se conecta con nosotros desde Perú. Él se define con una fórmula curiosa: «cantActor católico», es decir, que es músico y actor católico dedicado a la evangelización. Daniel cuida mucho el aspecto pedagógico de su trabajo, tratando de ganar el corazón de sus seguidores para Jesucristo.

Galo Oria, en este programa de «El galeón» nos habla, de la mano del cardenal Ratzinger, de los dos riesgos que existen para el ordenamiento jurídico de los países: el fin de la metafísica y la disolución del derecho por la presión de la utopía.

Yo no he necesitado aprender a perdonar porque el Señor me ha enseñado a amar.

Hoy, don Sebastián García-Noblejas, en este audio de «Acompañando a Jesús», nos anima a seguir el ejemplo de san Juan Bautista y a predicar la verdad sin miedo. Debemos dar testimonio, ofrecer ejemplo de vida y también hablar. No podemos quedarnos callados. Pidámosle a la Virgen María fortaleza para ser testigos fieles y fuertes.

Mayra nace en un ambiente ateo y difícil debido al cáncer que sufre su madre. Trata de defenderse del sufrimiento cerrando su corazón y poniéndose la careta de chica dura, hasta llegar a hacer bullying y ser popular en su colegio. Su juventud queda marcada por la impureza, las fiestas y el alcohol. Cualquier cosa con tal de ser la «chica guay». Pero, un día, se da cuenta de que no es feliz, especialmente tras ver como todo su grupo de amigas se convierten de un día para otro y se queda sola.

¿Todavía hoy en día tiene sentido el celibato? D. Jorge González Guadalix, en esta edición de «Reflexiones de un cura», afirma que, a pesar de todas las patrañas que se dicen en contra del celibato sacerdotal, sí que es válido y hoy más que nunca, ya que se fundamenta en la consagración total de su persona a su único amor: Cristo y la Iglesia.