¡Viva Cristo Rey! Con este grito, san José Sánchez del Río alcanzó la palma del martirio. Este adolescente de catorce años, tan joven, pero a la vez tan valiente, tenía una firme convicción: su amor a Jesús le llevó a dar la vida por la defensa de la fe en México. Descubre en él toda una vida de entrega y amor a Cristo.

Descubre la vida de «La Pequeña Nellie». Nelly era una niña irlandesa que siendo muy pequeña enfermó de tuberculosis. Ofrecía sus intensos dolores sin quejarse, sostenida por un gran amor a Jesús Eucaristía. Ella le llamaba «Dios Santo».

Descubre la vida de santa Inés. Nació cerca del año 290. Recibió muy buena educación cristiana y se consagró a Cristo con voto de virginidad. Tenía trece años cuando se enamoró de ella el hijo del Precepto de Roma, quien la solicitó en matrimonio. Ella respondió: «He sido solicitada por otro Amante. Yo amo a Cristo. Seré la esposa de Aquel cuya Madre es Virgen; lo amaré y seguiré siendo casta». Despechado el muchacho recurrió a su padre. De nada sirvieron los halagos ni las amenazas para doblegar la voluntad férrea de la joven Inés que fue denunciada como cristiana. Murió mártir en Roma en la segunda mitad del siglo III o, más probablemente, a principios del IV. Descubre toda una vida abandonada a Dios en «La Santidad es Posible».

Descubre la vida de santa Laura Montoya. Desde muy joven comenzó a forjar su relación con el Señor. Después de trabajar como profesora, experimentó que el Señor la llamaba a evangelizar a los indígenas. A través de la unión con Dios, de su abandono y confianza en Él, llegó a fundar una congregación religiosa: las Misioneras de María Inmaculada y Santa Catalina de Siena. Descubre toda una vida abandonada a Dios en «La Santidad es Posible».

¡Descubre la vida de san Maximiliano Mª Kolbe! Enamorado de la Virgen Inmaculada, funda la Milicia de la Inmaculada y construye toda una ciudad cuyo centro es Ella: la Inmaculada. Los nazis, durante la 2ª Guerra Mundial, lo detienen y lo llevan al terrible campo de concentración de Auschwitz. Allí entregó su vida a cambio de la de otro prisionero. En este gran santo se cumple lo que dijo Jesús: «Nadie tiene mayor amor que el que ofrece la vida por sus amigos». La santidad consiste en dar ese poquito más de amor. Da ese poquito más, y no te dejes arrastrar por lo fácil. ¡Hasta la próxima!

Descubre la vida de san Ignacio de Loyola: soñaba con historias de caballeros y princesas. Quería ser caballero y casarse con una bella mujer, pero en la guerra contra los franceses, Ignacio es herido en la pierna. En su recuperación le dan un libro sobre la vida de los santos, y es entonces cuando Ignacio comenzará a desear ser un caballero, pero de Dios.